el sambenito; especie de escapulario que la Inquisición colocaba al cuello de los penitentes como señal de expiación de sus culpas, debió ser en sus orígenes un cilicio en forma de saco, que, al estar previamente bendecido en la iglesia, recibió el nombre de saco bendito, dando origen al sanctus benedictus y, por contracción posterior, al sambenito.
Pero resulta que el escapulario en cuestión estaba hecho en lana amarillenta y llevaba pintada en rojo la cruz de San Andrés.
Pero resulta que el escapulario en cuestión estaba hecho en lana amarillenta y llevaba pintada en rojo la cruz de San Andrés.